
Pero sin duda, la peor experiencia de todas la estoy empezando a vivir hoy, 9 de junio de 2011.
Esta mañana mi hermandad del Rocío de Sevilla ha empezado su camino hacia la Aldea, mientras esto pasaba yo estaba haciendo un examen y ya os podéis imaginar como me he sentido y me siento.
Sé que me queda mucho por llorar, hoy solo es el primer día y hasta el miércoles que viene seguiré así, con mis más y mis menos pero mal.
La diferencia es que este año ha sido decisión mía, lo he tenido que hacer por mucho que me doliese por motivos académicos. Sinceramente no le deseo a nadie lo que yo siento ahora mismo, aunque muchos no lo entendáis que seréis la mayoría, es un sentimiento que jamás podré explicar, eso se siente y punto.
Ya estoy a la espera del próximo jueves 16 de junio en el que mi hermandad entrará en El Salvador y por supuesto iré a verla... Lo disfrutaré tanto como si hubiese estado todo el camino junto a mi simpecao, pero desgraciadamente no puedo estarlo, los sentimientos serán aún mayores.
El año que viene será: lo viviré por este y por el siguiente.
Aunque me cueste la vida decirlo: quiera o no, Rocío hay más y cada año es diferente.

este año no puedo verte, Señora...